El reflejo de un desconocido
De lo que pudo parecer y quizá fue... o no

22.4.04

Hoy tocó un poco de relajo y de reencuentros. Aprovechando que no tenía clase, quedé con Fátima, Desi y Puerto pa comer, charrar un poco y pasar la tarde juntos. Fátima cada vez me pone más de los nervios, es incapaz de dejar hablar al resto de la gente, metiendo baza en cualquier tema aunque le preguntes a otra persona, y opinar estando ella cerca cuesta de cojones. Puerto está cada día más guapa, a ésta es de las que le sienta bien madurar; eso sí, le sigue faltando un poco de chicha al hablar con ella, en cuanto la sacas del temas de la universidad la conversación dura 3 minutos. Y Desi sigue siendo Desi, podría estar con ella horas y horas seguidas sin cansarme, y cuando estoy con ella ahora me doy cuenta lo que echo de menos la época en la que nos pasábamos casi todos los días juntos. Sin embargo, ya no siento amor por ella, sólo un enorme cariño, y eso ha venido bien para recuperar mucha complicidad.

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